Pocas personas podrían decidir encerrarse en una caja por voluntad propia, especialmente cuando esa caja mide apenas 0.91 por 1.37 por 2.4 metros. Tim Shaw, un controvertido locutor de radio en el Reino Unido, es una de esas personas. Entre algunos de sus escándalos se encuentran el filmar por debajo de la falda de una de sus entrevistadas con una webcam y el de llamar en vivo a la casa de su abuela (haciéndose pasar por alguien más) para decir que él mismo había muerto. La única compañía con la que contará es una cámara, y toda la interacción que tendrá con el exterior es a través de una pequeña compuerta por la que recibirá comida y bebida. Él no tendrá la menor idea de dónde se encuentra la caja: Descubrir eso será tarea de aquellos que participen en el concurso.
Shaw irá recibiendo pistas sobre su actual ubicación, las cuales compartirá a través de la cámara con quienes sigan el streaming en vivo. Los participantes deberán utilizar Google Maps para determinar dónde están Shaw y la caja. Aquel que descubra primero el lugar ganará la nada despreciable suma de treinta mil libras esterlinas, y más importante aún, permitirá que Shaw pueda salir de la caja. Obviamente, todo depende de que los participantes tengan buena puntería a la hora de encontrar a Shaw, porque si fallan en su intento, el locutor deberá permanecer en la caja durante treinta días completos, que es la duración del concurso. Como si eso fuera poco habrá canales de chat, foros, y diferentes formas de interacción en las que incluso se podrá sugerir qué debe comer Shaw cada día.
El proyecto ha sido preparado con el objetivo de recaudar fondos para la fundación Help for Heroes, dedicada a asistir a oficiales del Reino Unido heridos en batalla. No caben dudas de que es una forma muy bizarra de juntar fondos para una buena causa, y todos se preguntan cómo hará Shaw para resistir estar encerrado en un espacio tan pequeño. El streaming en vivo comienzó el 15 de febrero a las 12PM (GMT), es decir, que ya lleva casi dos días encerrado. Y Shaw se verá sometido a ciclos de doce horas exactas de luz artificial. No se sabe cuántas pistas habrá para determinar su ubicación, pero los interesados deberán recorrer toda la red y prestar mucha atención si quieren esas treinta mil libras.
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